¿Cómo y cuándo iniciar a los niños en la tecnología?

¿Cómo y cuándo iniciar a los niños en la tecnología?

Vivimos inmersos en un mundo tecnológico, de eso no cabe duda, todavía más los que tenemos un trabajo centrado en este sector. Nuestros hijos demandan desde que son prácticamente bebés el uso de tablets, ordenadores y demás dispositivos eléctricos, pero, ¿cómo y cuándo debemos facilitarles un acceso adecuado a ellos? En este post de ADVISER repasamos las claves. 

La Asociación Española de Pediatría insiste en la importancia de que los más pequeños realicen un uso adecuado de las nuevas tecnologías para evitar posibles problemas derivados de su mala utilización. Ellos son una generación digital que ha nacido en mundo digital, por eso debemos ser capaces de educarles e inculcarles los valores adecuados, sólo que en un entorno diferente.

Los expertos aconsejan que no iniciemos a los más pequeños en el uso de nuevas tecnologías hasta al menos los dos años de vida. Por debajo de esa edad la Asociación Americana de Pediatría desaconseja el uso de cualquier tipo de pantalla. Cumplidos los dos años, el acceso a estos dispositivos, ya sea televisión, tabletas o teléfonos, debe estar supervisado en todo momento por el adulto y restringido en el tiempo. Máximo dos horas diarias para evitar el impacto negativo de estos contenidos sobre el cerebro del niño. A partir de los cinco años, están preparados para hacer una mayor inmersión en este mundo, pero siempre debemos estar los adultos para guiarles adecuadamente, ayudarles a que conozcan cuáles son las herramientas adecuadas para ellos y cómo utilizarlas, así como ir advertirles de los posibles peligros que puede generar su mal uso. Si acceden a redes sociales debe ser mediante perfiles familiares o compartidos por nosotros. A medida que vayan creciente, sobre todo a partir de los diez años, querrán una mayor independencia y menos control por nuestra parte, pero debemos seguir alertas e inculcándoles los peligros de su mal uso. Una forma educativa y muy saludable de iniciar a nuestros pequeños en el mundo tecnológico es mediante la robótica. Se han puesto muy de moda las academias que imparten este tipo de clases y han recibido una gran aceptación por parte de niños, padres y educadores. ¿Por qué? La robótica les da la oportunidad de montar y programar su propio robot desde los siete años. Mediante un ordenador, un motor, sensores y otras piezas, pueden aprender a construir un robot. Después, de la mano de un programa que ofrece un lenguaje gráfico sencillo, basado en iconos, pueden aprender conceptos básicos que les permitirán programar esos robots. La robótica favorece el desarrollo de las capacidades de los más pequeños, fomenta la resolución de problemas y el trabajo en equipo, elementos fundamentales para una correcta inmersión en este mundo tecnológico.